Lasaña de salmón: receta sencilla

Receta ↓ Ángela Solar

Una delicia casera al alcance de tu mano, esta lasaña de salmón te hará sentir como un chef en tu propio hogar.

Con ingredientes frescos y una preparación sin complicaciones, este plato se convierte en la estrella de cualquier mesa. ¿Quién podría resistirse a la suave textura del salmón entre capas de pasta?

Si buscas más inspiración culinaria, te invitamos a probar la receta fácil de lasaña de calabacín, o para un toque más tradicional, la lasaña de verduras y champiñones te espera.

Esta lasaña de salmón es perfecta para cualquier evento, desde un almuerzo familiar hasta una cena íntima. ¡No esperes más! Descubre los pasos a seguir para conquistar los paladares más exigentes.

Ingredientes esenciales

Para esta exquisita lasaña de salmón, estos son los protagonistas que no pueden faltar en tu cocina:

• Placas de lasaña - Ya sean precocidas o no, asegúrate de que sean de buena calidad para que sostengan bien nuestro suculento relleno.
• Salmón fresco - Nada como la frescura para darle ese sabor único a nuestra lasaña. Si lo prefieres, también puedes optar por salmón ahumado para un toque diferente.
• Nata líquida - Es el secreto para una salsa suave y cremosa. ¿Te preocupa la grasa? Puedes elegir una versión ligera o incluso leche evaporada.
• Queso rallado - No escatimo en queso, adoro que se funda y dore al calentarse, pero si prefieres un sabor más suave, un queso tierno será tu mejor opción.
• Cebolla - Caramelizada o al natural, es el toque que realza todos los sabores. Si no eres fan, puedes omitirla o sustituirla por puerro para una versión más suave.

Con estos ingredientes, la magia está asegurada en cada bocado. ¡Manos a la obra!

Preparación del salmón

¿Preparados para descubrir el secreto de una lasaña espectacular? Recuerdo que la primera vez que probé esta receta, quedé fascinado por la combinación perfecta del salmón y la pasta. Desde entonces, se ha convertido en uno de mis platos favoritos para impresionar a mis invitados.

Así que, ¡vamos a cocinar el salmón juntos! Tenemos dos opciones: al vapor o al horno. Las dos son fáciles y te dejarán saborear un pescado jugoso y lleno de sabor.

1. Cocción al vapor: Coloca en un recipiente apto para vapor y déjalo cocinar durante unos 10-15 minutos, o hasta que esté cocido a tu gusto. ¡La cocción al vapor mantiene el salmón húmedo y tierno!

2. Cocción al horno: Precalienta el horno a 180°C y coloca el salmón en una fuente para hornear. Cocínalo durante unos 12-15 minutos, o hasta que esté cocido a tu gusto. ¡El horno le dará un delicioso sabor tostado!

Una vez cocido, desmenuza el salmón con un tenedor para obtener trozos suaves y jugosos, perfectos para incorporar a nuestra bechamel.

¡Vamos a por la bechamel!

Sé que puede parecer intimidante, pero créeme, ¡es más fácil de lo que piensas! Yo recuerdo cuando mi abuela me enseñó a hacerla por primera vez. Me parecía magia ver cómo se espesaba la salsa y cómo envolvía la pasta en una nube cremosa.

Para esta receta, prepararemos una salsa ligera.

1. Empezamos calentando un poco de aceite en una sartén y sofriendo la cebolla picada hasta que esté transparente.
2. A continuación, añadimos la harina y removemos para formar un roux. ¡No te preocupes si se pega un poco al fondo de la sartén! Eso le dará un toque de sabor extra a nuestra salsa cremosa.
3. Después, vertemos la nata líquida poco a poco, sin dejar de remover. Si quieres hacer una versión más ligera, puedes usar leche en lugar de nata. ¡Ojo! Si usas leche, es mejor calentarla antes de añadirla para evitar que se formen grumos.
4. Una vez que la salsa haya espesado, añadimos el pescado desmenuzado y removemos suavemente para mezclarlo bien con la bechamel. ¡Este es el momento de probar la salsa y ajustar la sal si es necesario!

¡Y ya está! Nuestra bechamel de salmón está lista para usar. ¡Te aseguro que le dará a nuestra lasaña un sabor espectacular!

¡Montaje de la lasaña, una obra maestra en cocina!

¡Estoy segura de que te encantará montar esta deliciosa lasaña de salmón! Empezaremos colocando una capa de placas de lasaña en el fondo de una fuente para horno.

Cubriremos las placas con una generosa cantidad de bechamel, ¡recuerda que es el secreto de este plato! Espolvorearemos queso rallado por encima y repetiremos el proceso hasta agotar los ingredientes.

Mi truco personal es alternar capas de bechamel de salmón con capas de rodajas de tomate, ¡le da un toque único!

Terminaremos con una capa de queso rallado en la superficie, ¡para que quede bien crujiente! Hornearemos la lasaña a 180°C durante aproximadamente 25-30 minutos, o hasta que el queso esté dorado y crujiente.

¡No olvides dejarla reposar unos minutos antes de servirla, para que los sabores se asienten y sea más fácil de cortar!